Padre nuestro... #346

El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?

No somos huérfanos.
Ni seres echados al aire después de una conjunción aleatoria de células azarosas.
Somos seres creados por una mente inteligente.
Diseñados con una cuidadosa planificación, con capacidad de creer, filosofar y compartir  emociones que nos conectan en una identidad.
Creados con voluntad para escoger.

Antes de la venida del Señor Jesús la paternidad de Dios se muestra en pocas ocasiones.
Al nacer como Hijo de Hombre,  el Señor se nos va develando en toda una nueva dimensión y en especial la de un Padre bueno, preocupado de sus criaturas y de sus hijos en particular.
-“Padre nuestro, que estás en los cielos”
-“tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará…”
- “Ora a tu Padre…”
-“Vuestro Padre sabe de qué tenéis necesidad…”
-“vuestro Padre os perdonará”.
-“Vuestro Padre dará buenas cosas…”
-“¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”
-“a vuestro Padre le ha placido daros el reino.”
No solo un diseñador que mira el objeto creado; no solo un Dios lejano; no solo un Señor que pide obediencia.
Un Padre.
Cercano, cuidadoso, incondicional, lleno de ternura y compasión; comprensivo y perdonador.

¿No te emociona hasta los huesos que Dios sea tu Padre?
Es la noticia más maravillosa que podemos disfrutar y compartir ¡Aleluya!
No hay otro estado de gracia superior a ser llamados hijos de Dios.
No hay otra dignidad que supere la calidad de hermanos de nuestro Señor Jesucristo.
Insondable.
Misterioso.
Incomprensible.
Magnífico privilegio.


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La foto del día:

Flor de Navidad. Su nombre científico es Euphorbia pulcherrima, pero es más conocida como Flor de Pascua o Flor de Navidad. Es una de las plantas que más se venden en la época pre navideña. Se las puede encontrar a la venta en floristerías y hasta en los supermercados. Diciembre 2019.