Marcos 2:8
La suspicacia es un pensamiento que impide ver la realidad espiritual.
La suspicacia es inseguridad pura.
Ella tenía esa sutileza de mente y me decía. "tú pensarás esto ¿verdad?" Mis pensamientos no habían andado ni cerca de lo que ella sugería. Eso la frustraba.
¿Por qué algunas personas tienen la rara manía de suponer que los otros piensan o harán según esos supuestos?
La suspicacia nos inclina a sospechar.
El marido de su esposa como un Otelo ofendido imaginariamente..
La esposa de su marido.
Los ciudadanos de sus gobiernos.
Los gobiernos de sus políticos.
Los patrones de sus empleados.
Y así, suma y sigue...
En este caso, los escribas piensan mal del Señor. Lo interesante es que aun no lo verbalizan y ya se han cazado con sus pensamientos, sin entender que para Él eran transparentes.
"Algunos de los escribas que estaban allí sentados, se decían a sí mismos:
«¿Qué es lo que dice éste?
¡Está blasfemando!
¿Quién puede perdonar pecados?
¡Nadie sino Dios!»
Enseguida Jesús se dio cuenta de lo que estaban pensando, así que les preguntó: «¿Qué es lo que cavilan en su corazón?"
El Señor Jesucristo nos enseña en muchas ocasiones la importancia de pensar limpiamente.
Que cuidemos nuestro interior.
El salmista -siempre tan honesto- rogaba "Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno. (Salmos 139:23-24)
Es una excelente oración para hoy.
Si te han herido, si te han defraudado, si has perdido la confianza, te animo a cuidar tu mente con buenas lecturas, buena música, buenos amigos. Y a confiar en el amor y la protección de Dios.
Que haya paz en tu corazón.
Aquí algunos ejercicios para pensar mejor:
https://apuntes2019.blogspot.com/2019/06/6-ejercicios-para-aprender-pensar-dia.html
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