Cuando Jesús sanó a un ciego los discípulos preguntaron ¿Quién pecó para que este hombre deba sufrir de esta manera?
“Jesús respondió: Ni éste pecó, ni sus padres; sino que está ciego para que las obras de Dios se manifiesten en él”.
Vivimos en un mundo caído y convivimos con una infinidad de discapacidades. El Señor desea mostrar su gloria a través de ellas.
Explicarnos el sufrimiento no es una tarea sencilla.
Tenemos la gran esperanza que es saber que Dios desea mostrarse a través de la sanidad, creemos que Él es Dios sanador.
"Enjugará toda lágrima de sus ojos, y ya no habrá muerte, ni habrá más duelo, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas han pasado" (Apocalipsis 21:4).
Por sobre cada pena, debilidad o una pérdida estamos seguros que “…esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación, al no poner nuestra vista en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas" (2da a los Corintios 4:17-18).
Atrevámonos a hacer esta semana la obra de Dios en la tierra, toque con sus manos para bendecir a alguien, ore por un enfermo, dé una palabra de aliento y fe.
Compartamos la gracia de Cristo entre los seres humanos.
Confiando en Dios aunque la vida duela.
http://bibliotecadardegracia.blogspot.com/2013/08/
Ceguera, una explicación amplia.
https://www.biblia.work/diccionarios/ceguera/
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